¡De aquí no nos vamos!

Érase un edificio un poco ruinoso, éranse unos vecinos mas ruinosos aún, érase un casero decidido a vender el edificio, érase un vecindario dispuesto a no irse... érase la historia de un secuestro.

Así comienzan los problemas, pues el secuestro no sale según lo planeado y no hará más que complicarse. ¿Hasta dónde puede llegar una persona honrada cuando no le dejan muchas opciones? ¿Será capaz de llegar hasta el final?... La necesidad impone, porque como dijo aquel: “Más cornás da el hambre”.

La historia (escrita por Enrique Muñoz en mayo de 2009) transcurre en un ruinoso edificio en la que malviven una serie de peculiares personajes. A pesar de las penurias que pasan los miembros de esta comunidad de vecinos, el casero del edificio está dispuesto a echarles a toda costa. Ante tal situación desesperada, los vecinos deciden defenderse.

Esta obra cuenta con una coreografía creada y dirigida por Jorge Millán.

Una trama abordada en clave de comedia que, exageraciones aparte, crece en el humus de la actualidad (...) Pero que también me recuerda bastante a otras historias que nutrieron el teatro y el cine hace unos años, entre las que destacaron en popularidad las firmadas por José Luis Alonso de Santos, del estilo de La estanquera de Vallecas o Bajarse al moro.

Pedro Zabalza, noticiasdenavarra.com

De "De aquí, no nos vamos" hay que decir en primer lugar que es una comedia muy simpática, en la que su autor, que es también el director y uno de los intérpretes, ha sabido sacar muy buen partido de un repertorio de personajes bien dibujados, con muchas posibilidades de dar juego en una obra coral como esta. Demuestra conocer bien cómo mantener el interés y la tensión dramática con una serie de puntos de giro y de apariciones sorprendentes (...) También hay hallazgos muy interesantes, como la moviola que nos lleva a ver el origen del secuestro una vez que la pieza comienza in media res.

Pedro Zabalza, noticiasdenavarra.com

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